La Casa del Bisonte

«Fractal es un texto que transita gozosa y tortuosamente lo poético, la interpelación de lo real y el ensueño, el fidelismo mimético y la fabulación libérrima, la introspección y la extrañeza primordial frente a uno mismo y el mundo. Y todo ello discurre en umbrales de revelaciones que nunca terminan de ser tales, aunque no podrían ser otra cosa; de latencias inquietantes; de fragmentos (el título de la novela es  pertinente) que bien podrían ser pesadillas o epifanías, sin solución de continuidad posible. En el texto, nada es lo que parece; nada, salvo el texto mismo. La narradora despliega, siempre en un mismo acto, empatía y desapego hacia sus personajes, una saga mínima y suficiente de seres entrañables, habitantes de luminosa penumbra y de difícil asimiento. La novela, un triunfo de lo ambiguo en el cabal y pletórico sentido posible, es, pues, un acta del abandono y la ausencia, y también, persuasivamente, por virtud de su prosa envolvente, de inusitado lirismo, una inmersión lúcida en el misterio hostil, apasionante, de lo humano».

 

Jimmy Marroquín Lazo

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«Fractal (2017), la novela coral de Lenka Menéndez, toma el nombre de las formas geométricas hechas por áreas similares, pero en diferente escala, que se reproducen deformadas indefinidamente. Estas formas se encuentran, en realidad, en todo el mundo exterior, porque entender lo fractal es una forma de comprender lo informe y lo irregular de la vida. Es una entrada al caos y al absoluto. Esa es la intención de la estructura de la novela de Lenka, no separada por capítulos sino por líneas y segmentos de historias de amor que se yuxtaponen en su movimiento múltiple y caótico. Fractal diseña el circuito de los años universitarios, el tramo de la edad de asombro entre la salida del ámbito familiar y el ingreso a los ambientes intelectuales y artísticos urbanos. Es una novela de situaciones que van ensamblando lo indetenible, fragmentos de vida que en alguno de sus lados forman desenlaces y en otros solo un acaecer. Y estas escenas van apareciendo para nosotros con la frescura y el desenfado que Lenka pone en sus personajes, recuerdo y proyección de su humor inteligente».

 

Carlos Morales Falcón

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Lenka Menéndez: 

 

(Lima, 1981—Culemborg, 2017), nació el 9 de enero. Estudió Literatura en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos en Perú y alternó estos estudios con ocupaciones diversas. Se aficionó al flamenco, incursionó en el teatro, el dibujo y la pintura. Cuando viajó a Holanda, en el 2009 —donde radicó con su familia nueve años, volviendo esporádicamente al Perú—, siguió cursos de pedagogía para inaugurar su taller de enseñanza del español. Sus últimos intereses la inclinaban a la militancia cívica en proyectos de bien común y activismo político. Aficionada al cine, del que esta novela es tributaria, y a las múltiples manualidades, que practicaba en el hogar, acumuló en secreto, durante diez años, la escritura de estas páginas de humor vital, inquietud reflexiva y el asombro de una vida sin concesiones que se superponen en su novela Fractal (2017).

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